lunes, 13 de julio de 2015

1816 - 9 de julio - 2015

 












A casi 200 años de aquella fecha fundamental de nuestra historia, en medio de la situación actual, las preguntas son: ¿cuál es la independencia pendiente?; ¿todos nosotros nos sentimos verdaderamente libres?







 "La Declaración de Independencia del 9 de julio de 1816, pronunciada en el recordado Congreso de Tucumán, imprimió una huella en el corazón de todos los argentinos, marcó el inicio de un camino que hoy seguimos transitando. No fue un hecho espontáneo: fue la respuesta a un largo y complejo proceso, que no estuvo exento de marchas y contramarchas y de momentos cargado de tensión e incertidumbre.
  Hace poco menos de dos siglos nuestro país comenzaba su historia como Nación independiente y soberana. A menudo, cuando nos referimos a los acontecimientos históricos, estos suelen parecernos lejanos y distantes, sin embargo, al recordar las circunstancias que rodearon los sucesos de 1816, tal vez podamos encontrar un punto en común con nuestra realidad actual.
  Hechos sociales y políticos de una época convulsionada por las decisiones extranjeras sobre nuestra patria en gesta, dieron inicio a un incipiente cambio.
  Recordemos que en 1816, nuestro país no pasaba por un buen momento ni en lo económico ni en lo político. También existían conflictos internos porque no se llegaba a un consenso respecto al sistema político que se debería implementar. Pero sin embargo, pese a los numerosos desacuerdos y a todos los inconvenientes, los congresistas reunidos en Tucumán optaron por declarar solemnemente la independencia respecto a España y toda otra dominación extranjera.
  La mañana del 9 de julio de 1816, cuando Juan José Paso, luego de leer la proposición dentro de un clima de gran expectativa, preguntó a los diputados si deseaban que las provincias de la Unión conformaran una nación libre e independiente de los Reyes de España, los congresistas, más allá de los desacuerdos, respondieron afirmativamente con una aclamación cerrada y luego, individualmente, ratificaron la aprobación.
  Este consenso unánime respecto a la declaración de la Independencia nos hace reflexionar sobre la valentía que tuvieron los protagonistas de nuestra historia par hacer frente a sus diferencias personales y a las dificultades que se les presentaban.
  La Declaración de la Independencia fue un acto soberano y colectivo. El histórico Congreso de Tucumán reunió por primera vez a 28 diputados que sesionaron y debatieron día a día durante muchos mese para proyectar una nueva nación. Allí se trazaron los primeros lineamientos de lo que luego sería la Argentina.
  Han transcurrido casi 200 años desde que sucedieron estos acontecimientos y todavía escuchamos decir que somos una nación joven que intenta constituirse a sí misma.
  Lejos estamos de haber alcanzado la madurez necesaria para que todos los habitantes de nuestro país puedan vivir con dignidad y de alcanzar el modelo de nación que anhelamos. Pero es fácil responsabilizar a otros de nuestro destino, pensemos al menos por un momento que cada uno de nosotros somos responsables y protagonistas del presente y futuro del país. La historia la hacemos entre todos.
  Aún estamos a tiempo de revisar nuestras actitudes cotidianas y ser verdaderamente libres. Imitando la valentía de aquellos que decidieron cortar lazos con España para ser responsables de una historia independiente, podríamos asumir verdaderamente nuestro propio destino y construir un país solidario, más honesto, más responsable y justo. Porque la Patria es algo más que un concepto abstracto, es algo que creamos día a día, entre todos."
Patricia Campitelli


La mañana empezó muy temprano preparando tortas fritas para el CAFÉ CREATIVO... ¡¡¡gracias MAMÁS!


  El 9 de julio de 1816 imprimió una huella en el corazón de todos los argentinos, marcó el inicio de un camino que hoy seguimos transitando.
  Para seguir construyendo entre todos los herederos de esta Nación, un país LIBRE e INDEPENDIENTE, hoy deberíamos:
ROMPER CADENAS DE INJUSTICIA
RECHAZAR LA MENTIRA
DEJAR DE LADO EL EGOÍSMO
SUPERAR LA AMBICIÓN DESMEDIDA
SER MÁS POSITIVOS
FACILITAR LA CONVIVENCIA
TOLERAR DIFERENCIAS
REEDUCAR EN VALORES
DISFRUTAR EL TRABAJO
CELEBRAR LOS TRIUNFOS
CUIDAR EL MEDIO AMBIENTE
VALORAR LO NACIONAL ANTES QUE LO EXTRANJERO
SER SOLIDARIOS
BUSCAR LA UNIÓN
FOMENTAR LA PAZ

Teniendo en cuenta estos aspectos y pensando cómo ayudaríamos a construir la libertad y/o la independencia desde nuestro lugar, participamos en un café creativo con la posibilidad de elegir distintos talleres: dibujo, grafitis, música, baile/expresión corporal, video/corto, poesía e historietas.